El Ayuntamiento de Madrid ha decidido sustituir el adoquín de la calle Mayor en su confluencia con la Puerta del Sol por asfalto atendiendo a la intensidad del tráfico por la zona, así como a motivos de seguridad y de reducción de la contaminación acústica, según ha señalado el director general de Vías y Espacios Públicos de la capital, Pablo Usán, durante la comisión ordinaria de Obras celebrada este jueves.
Qué - 21 de octubre de 2010 - MADRID, 21 (EUROPA PRESS)
El Ayuntamiento de Madrid ha decidido sustituir el adoquín de la calle Mayor en su confluencia con la Puerta del Sol por asfalto atendiendo a la intensidad del tráfico por la zona, así como a motivos de seguridad y de reducción de la contaminación acústica, según ha señalado el director general de Vías y Espacios Públicos de la capital, Pablo Usán, durante la comisión ordinaria de Obras celebrada este jueves.
Así, ha indicado que la rehabilitación del tramo de la calle que se llevó a cabo en agosto responde a las necesidades de la zona, por donde cada día pasan unos 15.000 vehículos, llegando a ser 1.300 en hora punta.
"Ese hecho, junto con el elevadísimo tránsito peatonal nos llevó a pensar que la solución más idónea sería diferencia de forma notoria e inequívoca para el peatón el material de calzada y acera, configurando la misma con un pavimento asfáltico que contraste con el granito de las aceras", ha apostillado el responsable municipal.
De esta manera, además de garantizar la seguridad de los ciudadanos "porque los pasos de cebra están regulados por semáforos", también "se mejora la comodidad para los viajeros del transporte público, muy intenso en este tramo" y "se reducen las emisiones sonoras de la rodadura de los vehículos".
"Esto es coherente con lo ejecutado el año pasado en la remodelación de la Puerta del Sol con la carrera de San Jerónimo", ha apostillado Usán, señalando por último que la decisión de suprimir zonas adoquinadas se realiza "de forma extraordinaria" según "criterios técnicos y de seguridad vial", teniendo en cuenta asimismo "la intensidad del tráfico, la existencia de semáforos para el paso de peatones, el paso de transporte público y el ruido".
Por último, ha subrayado que las calles adoquinadas son fundamentalmente las de "viario de coexistencia", es decir, donde "quiere dotarse de prioridad al peatón", y ha recordado que en ellas se realizan únicamente "labores de conservación". De hecho, hasta julio el Consistorio había realizado 72 actuaciones de este tipo, a las que se han sumado otras 128 entre agosto y la primera quincena de octubre.
Por ello, Usán ha afirmado que "el estado de los pavimentos es aceptable" y que "el trabajo se está notando", si bien el portavoz socialista en el área, José Manuel Rodríguez, ha discrepado sobre la situación aceptable de las condiciones de uso de esas calles de la que presume el Ejecutivo local, y ha dudado de que existan criterios reales para decidir suprimir las zonas adoquinadas.
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