Madrid. Guerra abierta por el ruido: la plaza de Chueca se queda sin Orgullo Gay

 

Guerra abierta por el ruido: la plaza de Chueca se queda sin Orgullo Gay

EcoDiario.es | 10/06/2011 -

Chueca, todo un referente para la comunidad homosexual española y mundial es, hoy por hoy, escenario de una feroz batalla de intereses encontrados en el que distintas asociaciones pelean por las celebraciones del Orgullo Gay, que arrancan el próximo 29 de junio.

A un lado se sitúa la Asociación de Vecinos de Chueca (AVChueca), una plataforma ciudadana que defiende el derecho de los vecinos del barrio por encima de unas celebraciones que, según ellos, con sus excesos impiden la vida normal en el barrio durante la celebración del Orgullo, que este año tendrá lugar entre el 29 de junio y el 3 de julio.

Por el otro, los organizadores tradicionales de esta fiesta reivindicativa, AEGAL (Asociación de Empresarios Gays y Lesbianas), la Federación de Lesbianas, Gays, Transexuales y Bisexuales (FLGTB) y la recientemente creada asociación vecinal Chueca por la Diversidad, afín a los organizadores y que, según la otra asociación del barrio, se habría constituido con la única intención de tratar de hacerles sombra haciendo ver que también hay vecinos que apoyan la celebración.

En medio se halla el Ayuntamiento, un juez que podría acabar en el banquillo, de prosperar el recurso administrativo contra el Gobierno municipal presentado por la AVChueca, presidida por Esteban Benito. En su página web se agarran a la nueva ordenanza municipal contra el ruido para solicitar al Consistorio que no permita exceder temporalmente el tope sonoro regulado, tal y como es su potestad, atendiendo a la ubicación de dos residencias de ancianos -en Vázquez de Mella y en Gravina-. La existencia de estos centros, según el artículo 19.3 de la normativa, elimina la facultad municipal de conceder excepciones: "si en un radio de 150 metros del lugar en que se pretendan celebrar los actos, existen residencias de mayores, centros sanitarios con hospitalización o con servicios de urgencias, o centros docentes cuyo horario de funcionamiento coincida con el del acto pretendido".

La plaza de Chueca se queda fuera

El Ayuntamiento, que el año pasado abrió expediente sancionador contra la organización del Orgullo Gay, a instancias de la AVChueca, que demostró cómo se había superado ampliamente los 120 decibelios en determinadas zonas, cuando excepcionalmente sólo podían alcanzarse los 90, comunicó ayer a AEGAL los límites de ruido permisibles para este año y que obligará a prescindir del tradicional escenario que se montaba en la plaza de Chueca, corazón de la zona y de la reivindicación, al hallarse a menos de 150 metros de una residencia de ancianos. Además, sólo estará permitido rebasar el límite de ruido el jueves, viernes y sábado, dejando fuera el día de inicio y final de la fiesta.

Descontento general

Estas primeras medidas no han contentado, sin embargo, ni a una ni a otra parte.

La AVChueca quiere más y ha solicitado que no se permita la instalación a bares de ninguna barra en las calles ni el corte de vías para instalar escenarios, el bando contrario lamenta la pérdida para la fiesta de un escenario tan simbólico como el de la plaza de Chueca, según publica hoy el diario El País.

Tanto AEGAL como FLGTB confían en que de la reunión que tienen prevista para la próxima semana con el alcalde Ruiz Gallardón puedan obtener algo positivo para sus intereses, al tiempo que los más radicales de Chueca por la Diversidad acusan a Medio Ambiente de querer sacar las fiestas del barrio y hablan incluso de suspender las fiestas como señal de protesta.

¿Cuestión de dinero?

El Orgullo Gay, además de lo reivindicativo de su celebración, en cuanto a la lucha por la igualdad de derechos de la comunidad gay y transexual, tiene una importantísima repercusión económica en la ciudad, habiéndose convertido en la gallina de los huevos de oro para el sector turístico y hostelero.

Los vecinos de la AVChueca denuncian precisamente ese tinte mercantilista que ha protagonizado, según ellos, la celebración en los últimos años y que, a su modo de ver, hace que prevalezca sobre los derechos de los residentes de la zona. Además de rechazar cualquier acusación homofóbica, no han sido pocas las que han recibido pese a contar entre sus numerosos asociados multitud de homosexuales, la AVChueca ha presentado además al Consistorio más de 100 cartas de otros tantos comerciantes, quienes exigen que los permisos municipales para las actividades festivas no perjudiquen "los derechos de los residentes a vivir en condiciones humanamente razonables, ni los derechos de los comerciantes que no participan del negocio MADO.