Oviedo
El fallo rechaza los argumentos de los vecinos que pedían la revocación de la licencia del bar y 150.000 euros por daños y perjuicios
El Comercio - 11.05.11 - IDOYA REY | OVIEDO.
La entrada principal a la discoteca Morgana. :: JESÚS DÍAZ
Dos vecinos del número 17 de Cimadevilla, el edificio colindante con el bar Morgana, además de demandar a los dueños del pub por la emisión de ruidos, iniciaron un procedimiento Contencioso Administrativo contra el Ayuntamiento. La primera denuncia está pendiente de la resolución de la Audiencia Provincial (en primera instancia los juzgados ordenaron el cierre de local, pero los propietarios recurrieron); el segundo, se resolvió ayer: el juez concluyó que el Consistorio no tenía responsabilidad patrimonial en el asunto.
La polémica se remonta al año 2004. La comunidad de propietarios decidió demandar al bar porque «los ruidos durante los fines de semana no les dejaban dormir». El juzgado emitió el 17 de septiembre de 2004 una sentencia condenatoria. Obligaba a los propietarios a abonar a los afectados 9.000 euros. Pero ni demandantes ni demandados, estaban de acuerdo con el fallo y recurrieron a la Audiencia Provincial. Ya en marzo de 2005, los magistrados ordenaron obras de insonorización en el local. Si no las efectuaban en el plazo de tres meses, el bar sería cerrado.
Pero dos de los vecinos, Carlos Álvarez y María Mercedes Rozas, decidieron acudir de nuevo a los tribunales porque consideraban que los trabajos eran insuficientes. El pasado enero, el Juzgado de Primera Instancia número 3 de Oviedo consideró que «que ni la condena anterior ni las demandas de ejecución ni las denuncias ante el Ayuntamiento han servido para que los demandados redujesen sus emisiones sonoras a los niveles legalmente permitidos ». Por ello, condenaron a los propietarios del local a la clausura del Morgana. También, a pagar 12.000 euros a los afectados por los daños y perjuicios sufridos. Un proceso sobre el que aún no se ha dicho la última palabra, pues los hosteleros alegan que el ruido proviene de la discoteca Tribeca, que ocupa los sótanos del Morgana.
Cuando los demandantes recibieron este año el fallo favorable a sus peticiones, se personaron en el Juzgado de lo Contencioso Administrativo número 2. Solicitaron al Ayuntamiento la revocación de la licencia al bar Morgana y exigían al Consistorio responsabilidad patrimonial por «su pasividad en el control del ruido de dicho establecimiento». Además, reclamaban una indemnización de 150.000 euros por daños y perjuicios. Pero tras analizar el caso, el juez ha desestimado la denuncia.
Relata la sentencia que «no hubo silencio administrativo» porque los técnicos de Medio Ambiente intentaron acceder al domicilio de los demandantes. «Puestos en contacto con el denunciante, éste pone de manifiesto su desconfianza hacia estos servicios y nos indica que no quiere que vayamos a medir», recoge el texto Intentaron, según el juez, ponerse en contacto con ellos en varias ocasiones. Al no obtener respuesta acordaron y comunicaron el archivo del expediente. «La solicitud presentada fue objeto de respuesta expresa, correctamente notificada y contra la que no se planteó impugnación alguna», concluye la sentencia. Los vecinos aún pueden presentar un recurso contra la decisión judicial.
No hay comentarios:
Publicar un comentario