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domingo, 8 de mayo de 2011

La incultura del botellón.

ARTÍCULOS

El botellón, 'revolución' universitaria

La utilización de las redes sociales para no ir a clase, 'gran éxito de dos mil estudiantes en la Universidad de Valencia

La Verdad - 08.05.11 - RAMÓN GÓMEZ CARRIÓN |

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Muchos estudiantes universitarios se empeñan en elevar la alcoholización de la juventud más formada a categoría de cultura. Ya se habla en algunos círculos de la 'cultura del botellón' y no me extrañaría que se catalogara como BIC (bien de interés cultural) antes que la fiesta de los toros. Hace un par de días, unos dos mil universitarios de Valencia decidieron hacer un botellón como protesta por el rumor de que desaparecía el concurso de paellas que otros años se organizaba por estas fechas. Si las autoridades universitarias llegaron a un acuerdo con los vecinos del Campus de Tarongers, hartos de paellas y más aún de botellones, ¿a qué viene la falta de respeto de los jóvenes al derecho a la tranquilidad del vecindario? Ese botellón (como tantos otros que se soportan en varias zonas de Alicante los fines de semana) se prolongó hasta la madrugada.

El rector de la Universidad de Valencia, Esteban Morcillo, ha condenado la barbarie de algunos jóvenes que, rebosantes de alcohol, entraron en las aulas y, con su anormal comportamiento, obligaron a los decanos a suspender las clases y cerrar los edificios universitarios, decisión que han apoyado Morcillo y los otros dos miembros del equipo rectoral, la vicerrectora Clara Martínez y el decano de Derecho Salvador Montesinos. Han intentado desdramatizar lo ocurrido apuntando que los universitarios botelloneros son una minoría dentro del alumnado de la Universidad. Y para que los alumnos no se lleven sólo palos, el equipo rectoral se muestra dispuesto a dialogar con ellos sobre alternativas de ocio en el recinto universitario.

Ante la evidencia del triunfo del botellón, cualquiera se pregunta qué formación (no sólo enseñanza) se imparte en la Universidad. ¿Cuáles son las alternativas de ocio? Algo importante falla cuando prácticamente no hay protestas universitarias casi nunca y la 'revolución' se constriñe al botellón. ¿Y las redes sociales? Las utilizan para no ir a clase y dejar sin ella a los que sí quieren estudiar. Ese fue el 'gran éxito' de dos mil estudiantes, a algunos de los cuales nos mostraron, cargados de alcohol, algunas televisiones, junto a bolsas de plástico, restos de comida y botellas por toda la zona.

¿Llevarán los políticos alternativas de ocio frente al botellón y que no sea el 'botellódromo dorado' con servicios de sanidad, limpieza y policía de seguridad?

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